Asumiendo El Reto de Cambiar

2 Corintios 5.17

De modo si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
Se puede decir de forma breve, que cuando no tenemos a Cristo Jesús de primer lugar en nuestro corazón pertenecemos al mundo.

El mundo en nuestra vidas, nos lleva a realizar cosas y tener actitudes que no le agradan nuestro Señor Jehová.

El mundo no es amigable dentro la vida espiritual de un Cristiano, pero sin ebargo vemos a muchas personas que han preferido estar en el mundo y realizar cosas que no son correctas a la luz de la palabra, por no decidir y determinarse a cambiar de Vida, y aceptar el sacrificio que nos regaló Jesús en la Cruz.

En el Libro de Génesis 17, 1-11

1. Era Abram de edad de noventa y nueve años, cuando le apareció Jehová y le dijo: Yo soy el Dios Todopoderoso; anda delante de mí y sé perfecto.

2. Y pondré mi pacto entre mí y tu, y te multiplicare en gran manera.

3. Entonces Abram se postró sobre su rostro, y Dios habló con el diciendo:

4. He aquí mi pacto es contigo, y serás padre de muchedumbre de gentes.

5. Y no se llamará mas tu nombre Abram, sino que será tu nombre Abraham, porque te e puesto por padre de muchedumbre de gentes.

6. Y te multiplicaré en gran manera, y haré naciones de ti, y reyes saldrán de ti.

7. y estableceré mi pacto entre mi y tu, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti.

8. Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra en que moras, toda la tierra de canaán en heredad perpetua; y seré el Dios de ellos.

9. Dijo de nuevo Dios a Abraham: En cuanto a ti, guardarás mi pacto, tú y tu descendencia después de ti por sus generaciones.

10. Este es mi pacto, que guardaréis entre mi y vosotros y tu descendencia después de ti: Será circuncidado todo varón de entre vosotros.

11. Circuncidaréis, pues, la carne de vuestro prepucio, y será por señal del pacto entre mi y vosotros.

El siervo Fiel Abraham a sido durante la historia un gran ejemplo de la determinación y la fé que se necesita para seguir y confiar en Jesús, por tal motivo es llamado el Padre de la Fé.

Nosotros como Creyentes, seguidores de Jesús en esta época, quizá no tendremos las mismas condiciones que tenía Abraham en su tiempo. Pero Jesús dice en su palabra en el Libro de:

Mateo 16, 24.

Entonces Jesús dijo a sus discípulos: si alguno quiere venir en pos de mi, niéguese a si mismo, tome su cruz y sígame.

Estas palabras de Jesús son las palabras mas radicales para saber que hay que cambiar, y no solo cambiar, sino asumir el reto de cambiar porque no es fácil.

Existen mucas dificultades en la vida del Cristiano y es el camino más difícil de caminar, mientras tengamos presente el reto de cambiar.

Debemos tener en cuenta que no se trata de nuestras fuerzas humanas, sino de la comunión que tengamos constantemente con El Espíritu Santo, el Espíritu Santo se encarga de fortalecernos cada día para lograr, con estos pasos tendremos una vida de cambio continuo:

1. Aceptar a Cristo en nuestros corazones.

Este es el paso mas importante y es donde Dios siembra en nuestras vidas el Amor, ese amor que se hace incondicional en nuestras vidas, y se nos hace sumamente fácil morir a la Carne, a los deseos mundanos.

Marcos 12.30

Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente, y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento.

2. Cuando estamos recién convertidos, que hemos aceptado a Jesucristo en nuestro corazón, este mandamiento del amor hacia Dios, es el primero que se aplica a nuestras vidas.

Esto facilita morir a la carne, de ahí en adelante vale la pena no dejar morir ese primer amor, eso se logra no dejando la comunión con nuestro Padre Celestial. Porque de hacerlo conlleva a un gran error y podemos caer nuevamente al pecado.

3. Proverbios 4.18

Mas la senda de los Justos, es como la luz de la Aurora, que va en aumento, hasta que el día es perfecto.

Con nuestro primer amor activo, y la comunión constante con el Espiritu Santo, cada día moriremos al Pecado y aceptaremos más la vida Justa y el camino hacia la perfección, hacia la santidad. Porque sin Santidad, nadie verá al Señor.

Dios quiere que seamos perfectos, Santos y puros. Tomar la Cruz de Jesús significa morir cada dia al Mundo, dejar lo que nuestra carne desea.

Tomar la Cruz de Jesús es asumir el reto de dejar una Vida llena de infecciones, para cultivar cada día una vida Santa y pura, digna de estar en frente del Santísimo y Todopoderoso Jesús, el día que el venga por nosotros.

Dios les Bendiga.

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